Cuidado con lo que deseas
Cuidado con lo que deseas
Porque los deseos no siempre se hacen realidad, pero el deseo gasta mucho tiempo, energías y concentración.
Lo que deseas determina cómo pasas una parte enorme de tu día. Si deseas algo que no puedes controlar, podría inundarte de frustración, llevarte a la melancolía o alejarte de un deseo que podría conducirte a un trabajo fecundo.
Mejor desear algo en lo que el propio deseo sea un acto de utilidad, que cambie tu actitud y tu centro de atención.