Una decisión menos
Uno de los mayores beneficios que me he encontrado en la vida es muy simple:
Cumple con tus compromisos.
Lo bueno es que una vez que has tomado una decisión, no tienes que preocuparte de ella más. Si estamos de acuerdo en que el día de entrega es el lunes, pues es el lunes, aunque no esté perfecto. Si has elegido una ropa para ponerte mañana, póntela, no lo pienses más. Si has decidido casarte, no te fijes en más gente, una decisión menos que tienes que tomar.
No cumplimos porque sea la decisión perfecta, cumplimos porque dijimos que lo haríamos.
Una vez que esto lo tienes claro, la calidad de lo que haces se dispara. En vez de perder el tiempo y la energía buscando excusas o alternativas, simplemente seguimos avanzando.
Y con el tiempo vamos mejorando respecto a qué compromisos adquirir.
Porque si te comprometes, cumples.